
Los extintores están ahí, colgados en la pared o guardados en una caja… pero ¿realmente están operativos?
En muchas empresas los equipos lucen bien a simple vista, pero fallan cuando se les necesita.
En este post te contamos las 5 señales más comunes de que tus extintores podrían no funcionar ante una emergencia, y cómo puedes identificarlas fácilmente durante tus revisiones mensuales.
El manómetro es el primer indicador del estado interno del extintor. Si la aguja está en la zona roja (baja o sobrepresión), es señal de que el agente extintor no está en condiciones óptimas.
Acción: Reemplazar o enviar a mantención inmediatamente.
El pasador de seguridad y su sello plástico garantizan que el equipo no ha sido manipulado ni utilizado. Si está roto o ausente, puede haber descarga parcial o intento de uso.
Acción: Revisar y reemplazar. Nunca dejar un equipo sin pasador en circulación.
Un extintor con óxido, abolladuras o residuos en la boquilla puede tener microfugas, lo que compromete su presión y su funcionamiento.
Acción: No basta con limpiarlo. Este equipo debe salir de servicio y evaluarse su reparación o reemplazo.
La trazabilidad es obligatoria según la NCh2056. Si el extintor no tiene etiqueta de revisión mensual o está vencida, no puedes demostrar que está operativo.
Acción: Registrar inmediatamente o enviar a revisión técnica.
Un extintor detrás de una puerta, dentro de una bodega, o tapado con cajas, pierde completamente su utilidad en una emergencia. También es infracción a la normativa.
Acción: Reubicarlo en un lugar visible, accesible y señalizado.
Un extintor inoperativo es un riesgo latente. La revisión mensual permite detectar estos problemas antes de que sea tarde.
En Surt realizamos servicios técnicos certificados, con trazabilidad, normalización y orientación clara para que tus extintores estén siempre listos.
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